En Hoteles Andaluces con Encanto nos hace felices saber que hay clientes que vienen a nuestros hoteles desde hace años; que empezaron a venir de niños con sus padres y ahora, de adultos, siguen eligiéndonos para sus vacaciones. Es el caso de Mariona Gastó, toda una vida fiel al Hotel Duque de Nájera de Rota.
- ¿Cuándo recuerdas haber venido aquí por primera vez?
Tengo muchos recuerdos mezclados, pero creo que el primero es con 3 o 4 años, jugando en la piscina de los niños, con otros niños que había de mi edad.
- ¿Pero ya venías antes?
Sí con un año. Yo nací en el 96 y el hotel abrió en el 98, vinimos justo antes de que yo cumpliera los dos, en otoño del 98.
- ¿Y por qué tus padres deciden venir aquí y no a otro sitio?
Nosotros veraneábamos en la costa mediterránea, pero allí hacía mucho calor de día y de noche. Teníamos que poner el aire acondicionado y yo me resfriaba mucho, porque era muy sensible a los cambios de temperatura. Descubrieron el Duque en Rota y quisieron probar para ver si aquí las noches eras más frescas, para que no me resfriara más. Probaron ese otoño, les gustó mucho, volvieron al siguiente otoño, y desde entonces todos los años hasta que nos frenó la pandemia.
- ¿Qué primera impresión tuvieron, porque era una cultura diferente, que idea tenías de esta zona?
Yo crecí con la costumbre de mis dos semanas de verano en Rota, con lo cual para mí era ir a lo conocido. Tenía amigos aquí, esperaba que llegara el verano con muchas ganas de verlos. Yo he crecido con mis veranos andaluces y no los imagino de otra manera.
- ¿Cómo era la gastronomía, el ocio, el tiempo libre, el sol, la playa…?
La gastronomía está muy arriba, como el pescadito frito, es algo que ahí arriba es impensable, no lo comemos igual. El ocio también pero distinto porque cada uno cuando viene de vacaciones viene a relajarse y yo recuerdo, de la playa a la piscina, de la piscina a la playa, visitar algo por supuesto, pero sobre todo disfrutar con mis amigos. Y yo pondría la facilidad para poder relajarse, es un sitio muy tranquilo.
- Es curioso porque has crecido con mucha gente que sigue trabajando aquí, tendréis una relación muy cercana.
Sí ha sido una relación muy bonita, hemos venido a propósito para alguna boda o lo que sea, de gente que conocemos aquí.
- ¿Y en el hotel?
Sí, en el hotel el personal todavía es de cuando yo era chiquita y justo hace poco estuve cenando en El Embarcadero y estaba Juan, me conoce desde que era niña.
- ¿Y el futuro cómo lo ves, vas a seguir viniendo?
Yo querría seguir viniendo, la verdad es que justo he venido que hacia un par de años que con la pandemia no venía y enseguida tenía muy clara que quería venir, aunque fuera unos días ahora en Semana Santa y en el futuro si tengo pareja y tengo hijos, a mí me gustaría seguir viniendo, porque para mí el verano es Rota y Hotel Duque, porque un verano cuando sea mayor que no sea en el Duque y en Rota me cuesta mucho imaginarlo.